No tengo ganas de seguir yendo a la universidad, me frustra no tener dinero para mí y debería estar en tratamiento, pero no tengo para pagar la hora al psiquiatra y los medicamentos, ni tengo las ganas de mejorar mi rutina o mi alimentación. Paso en mi cama porque no quiero estar en otro sitio. Estoy cansada a pesar de que no hago nada.