Desde hace un tiempo que no siento motivación por nada de lo que me gustaba hacer antes. Renuncié a mi trabajo porque ya no me sentía a gusto atendiendo a público y que pagaran mi desánimo por la vida. Ahora me encuentro sin pega y más sola de lo que estaba antes.
Duermo casi todo el día y cuando tengo que salir a comprar al súper o a la farmacia, tengo ataques de pánico antes de salir de casa. Me compré una agenda y empezaré a escribir para desahogarme y ver si de esa forma puedo seguir adelante.