Estoy tan cansada, el mundo no para de girar y en cada vuelta todas las desgracias que puede sufrir la humanidad parecen agravarse. Una pandemia, el capitalismo en sí, una crisis política y económica, la perspectiva de vivir una vida bajo un régimen laboral que me explotará hasta quitarme el alma, y ahora guerras, millones de vidas en riesgo. Vivimos en la peor línea temporal.